No siempre, que recuerde, se mantuvo al margen de la realidad. Empezó diferentes carreras: Filosofía, Derecho… Desempeñó, con mayor o menor fortuna, diferentes trabajos:  marinero, metalúrgico, chófer, funcionario (no tantos como Bukowski y sin invertirlo todo en alcohol). Intentó sumergirse en el relato breve, la poesía y las novelas, de las que, ésta queda, de momento. A la redacción de estas líneas vive aún, con más ganas de las que sugiere el texto, aguardando una evolución compasiva del clima que no extinga a todos sus hipotéticos lectores futuros.