María Isabel Sola Fernández nació en Bacares (Almería) en 1961.

Su padre, Vicente Sola, la inició en la lectura antes incluso de su escolarización a los 6 años. Desde entonces, leer se convirtió en su pasatiempo favorito.

Empezó con cuentos cortos, después siguieron los cómics y más tarde se aficionó a las novelas.

La primera novela que caló hondo en María Isabel, cuando todavía era adolescente, fue “Cumbres Borrascosas”, la primera y única novela de Emily Brontë, una obra original y rebelde que se convirtió en un clásico de la literatura inglesa.

Otra autora V. C. Andrews, y de entre todos sus libros, la saga de los Dollanganger, le hicieron llorar de emoción y despertaron en María Isabel un irrefrenable impulso de cultivar la literatura.

Así nació “Cuéntamelo, atardeceres rotos”.