Nacido en la ciudad que dio vida a la máquina de vapor y al sistema ferroviario; criado en tierras hispanas, no muy lejos de la romana Lucentum. Blancas las costas que nunca lo vieron, pues él recorrió su mundo como un ánima penitente, vagando a través de un Purgatorio de pladur.

Cursó Estudios Clásicos en la ciudad del Lazarillo. Ama la literatura, mas no tanto la contemporánea; adora las estridencias musicales, sobre todo el Death Metal y su equipo es aquella formación levantina que viste de blanco y negro.